Cabeza de turco

[Atalayero]

SER CABEZA DE TURCO.

Se dice de una persona que es objetivo de todas las acusaciones, especialmente injustas. También se dice de las personas sobre las que recae una acusación o una condena para evitar que los verdaderos culpables sean castigados. Por la historia sabemos que desde el tiempo de las Cruzadas a Tierra Santa, con motivo de la defensa y custodia de Jerusalén, los cristianos estuvieron luchando contra los turcos constantemente. El odio con que se miraban estas civilizaciones era tal, que no había mayor placer que cortarle la cabeza a un turco. Cuando lo conseguían, colgaban la cabeza en el mástil del barco o la ensartaban en una lanza y los soldados no cesaban de increpar a la calavera del muerto y de acusarlo de todas las desgracias posibles e imposibles. Por esta razón se dice que uno es cabeza de turco, cuando recibe todo el daño y todas las acusaciones de las que son culpable otros.

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'Cabeza de turco' es una de las obras más sobrecogedoras de los últimos tiempos. Su publicación provocó una conmoción en los más altos círculos políticos de la Alemania de la posguerra. Günter Wallraff elaboró una obra maestra, con un trabajo periodístico arriesgado y sacrificado. Posiblemente la obra más especial del autor alemán.

Günter Wallraff adquirió una nueva identidad durante dos años de su vida, convirtiéndose así en Alí el turco. Como Alí el Turco, Günter Wallraff realizó un reportaje sobre las penosas condiciones laborales que los inmigrantes turcos debían soportar para sobrevivir en la Alemania de esos años. Trabajos de limpieza en centrales nucleares sin protección alguna, en una industria farmaceútica como cobaya humana, como peón de construcción sin papeles...

'Cabeza de turco' se convierte en un mazazo de realidad para el lector. A lo largo de la obra encontramos nuevos personajes reales, que no son inventados, sino que existen de verdad, que padecen una vida de explotación y miseria. El carácter personal que tiene la obra impacta al lector. Günter Wallraff no nos cuenta una historia ficticia, nos sumerge en una realidad dramática. La acumulación despiadada de experiencias humanas truncadas por el despotismo arrastra al lector a una situación de compromiso con la obra y sus personajes.

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El Mundo, 29 de abril de 1998

Un ex jefe guerrillero kurdo «confiesa» a los turcos que el PKK asesinó a Palme

La Policía sueca pone en cuestión las declaraciones de Semdin Sakik

ANKARA.- La guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) es responsable del asesinato del primer ministro sueco Olof Palme en 1986, según una supuesta confesión del histórico líder kurdo Semdin Sakik, secuestrado recientemente por comandos turcos en el norte de Irak.

El diario turco Sabah reveló ayer en su primera página parte de la confesión de Sakik con detalles sobre el asesinato de Palme, pero el Ministerio del Interior no quiso comentar esa información.

El ministro sin cartera turco Sukru Sina Gurel tenía previsto informar ayer al embajador sueco en Ankara de los detalles de la confesión de Sakik, informa Efe.

Sakik abandonó el PKK hace más de seis meses por desacuerdos con el líder de esta formación, Abdulah Ocalan, huyó al norte de Irak y se entregó al Partido Democrático del Kurdistán (PDK) de Barzani, aliado de los turcos.

Hace dos semanas, fue secuestrado por un comando especial turco y, desde entonces, ha sido interrogado por equipos de especialistas en Diyarbakir, la conflictiva provincia suroriental turca poblada por kurdos. Según Sabah, Sakik dio muchos nombres, entre ellos de conocidos periodistas, hombres de negocios y políticos que supuestamente apoyaban al PKK.

De acuerdo con esta versión, el asesinato de Palme se fraguó a raíz de que la esposa de Ocalan, Kesire, abandonara a su marido y a la organización con un grupo de funcionarios de alto rango y se refugiara en Suecia en 1982, según las palabras de Sakik. Suecia consideraba al PKK como una organización terrorista y un rebelde que asesinó a uno de los amigos de Kesire fue condenado allí. Aquél fue el primer encarcelamiento de un miembro del PKK en Europa, por lo que, según el relato, Ocalan quería vengarse.

Tras las declaraciones de Sakik, que ha sido interrogado durante más de una semana por agentes antiterrorista, un portavoz de la policía de Suecia cuestionó la versión facilitada por Turquía. Lars Nylen, responsable de la Policía Criminal Nacional, indicó que, cuando sucedió el asesinato, la comisión que se dedicaba a investigar el magnicidio recibió indicaciones parecidas desde Ankara que no condujeron a ningún sitio.

Palme fue asesinado en Estocolmo el 28 de febrero de 1986 a los 59 años, cuando salía de un cine junto con su esposa.

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Olof Palme es el más conocido internacionalmente de los políticos suecos. Fue líder del Partido Socialdemócrata desde 1969 hasta su muerte, y primer ministro durante dos períodos (1969-1976 y 1982-1986). Además, mantuvo amplios compromisos internacionales.

Palme procedía de una familia de Estocolmo bien acaudalada. El padre fue director general de una compañia aseguradora, y la madre pertenecía a una familia de la nobleza germano-letona. Durante sus estudios universitarios, Palme estuvo un año como becario en el Kenyon College de Ohio, USA. Como representante de la Unión Nacional de Estudiantes de Suecia, viajó mucho por la Europa oriental a finales de los años cuarenta y comienzo de los cincuenta, pudiendo así hacerse una idea de los nuevos regímenes comunistas. Ya en sus años de estudiante se comprometió con el Partido Socialdemócrata. En 1953 fue empleado como secretario personal del entonces primer ministro, Tage Erlander. Palme fue elegido diputado en 1958; ministro sin cartera en 1963; ministro de Transportes y Comunicaciones en 1965; y ministro de Educación y Ciencia en 1967. Al retirarse Tage Erlander en 1969 por razones de edad como secretario general del partido y como primer ministro, Palme fue el sucesor natural.

A nivel internacional se comprometió profundamente con la problemática de los países del Tercer Mundo, así como en cuestiones sobre la democracia y el desarme. Condenó, a menudo en términos drásticos, los desmanes de dictaduras tanto de derechas como de izquierdas. Durante la guerra del Vietnam criticó duramente la actuación de Estados Unidos. Realizó una serie de misiones internacionales, siendo, entre otras cosas, mediador de la ONU durante cierto período de tiempo en la guerra entre Irán e Irak.

Fue muerto a tiros en pleno centro de Estocolmo en la noche del 28 de febrero de 1986, cuando, junto con su mujer, iba paseando a casa, después de haber estado en el cine. Su muerte aún sigue estando sin aclarar.